viernes, 4 de junio de 2010

Escaladores de hielo

Todo viaje personal o profesional comienza con algunas preguntas. Esta es mi creencia como entrenadora, por lo que hoy me permitiré compartir con ustedes tres cuestiones que han surgido en amena charleta con Igor, una persona apasionante con quien a veces tengo el lujo de quedar. La primera: ¿Cómo consigue un club de tenis ruso -que no tiene un céntimo y que tan sólo dispone de una pista cubierta- formar a más jugadoras que han alcanzado el top 20 que todo Estados Unidos? La segunda: ¿Cómo logra una humilde escuela de música situada en un local que originariamente fue una tienda (en Dallas, Texas) producir artistas y estrellas del pop con contratos fabulosos? La tercera: ¿Qué razones explicarían que en el seno de una humilde familia británica -asentada en un pueblo remoto y sin acceso a la educación superior- surjan tres escritoras del máximo nivel mundial?

La conversación se produce en la terraza del Café de La Concha, sobre la bahía de San Sebastián donde ha llegado el verano. Son las 9.30 de la mañana, el termómetro alcanza los 24 grados a la sombra y nos protegemos de un sol intenso bajo los blancos toldos. Fuera, los jardineros asesinan margaritas sin piedad con el pretexto de segar el césped. Arriba el limpido cielo azul. A nuestro lado, una avanzadilla de turistas de todas las nacionalidades alguno de los cuales -quizá- sea neurólogo y conozca la mielina, una sustancia que rodea el núcleo de las neuronas causante de la magia del despliegue del talento en acción.

Charlamos durante casi media hora (el tiempo de lo que denominamos nuestro kit kat mañanero) y coincidimos en que muchas de las personas triunfadoras de talento que conocemos se caracterizan porque se esfuerzan mucho por el logro de objetivos concretos, se permiten cometer errores, a ratos hacen un poco el ridículo, y con frecuencia escalan lo que el escritor Dan Coyle denomina "una pared vertical de hielo".

Recogemos nuestros bártulos, montamos en las bicicletas, contemplamos el césped sin margaritas, y nos comprometemos a profundizar juntos sobre las Claves del Talento (Editorial Zenith).

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