jueves, 26 de junio de 2008

La decisión de ser feliz

La decisión de ser feliz consiste en
disfrutar de lo que uno ya tiene...
mientras se encamina hacia el desarrollo del máximo potencial.

Tan simple como difícil de recordar,
de sentir, de vivir, en el día a día.

Creo en lo pequeño, en los detalles,
en el grano de arena que, al cabo de los tiempos y la persistencia
construyen montañas de logros.

La decisión de ser feliz conlleva el coraje de cambiar.
Cambiar las inercias, las rutinas, los fósiles mentales.

La decisión de ser feliz conlleva fe en que algo mejor
nos aguarda justo al otro lado de la llamada "zona de confort",
esa que nos resulta tan cómoda como amordazante,
la misma que nos tiene maniatados a eso que los
Coaches definimos como "toleraciones", cuestiones de nuestra
vida que nos desagradan y que, sin embargo, permanecen
durante lustros a nuestro lado como una sombra alargada
que nos impide crecer, rozar el cielo con las yemas
de los dedos.

Es posible. Sí, los pies en el mundanal ruído,
,en la tierra, hundidos como profundas raíces de roble.

Es posible. Sí, las manos en el espiritual cielo,
sin límites (A.Robbins) como esas nubes algodonosas
que contemplo ensimismada cada vez que viajo en avión...

"Gozamos del derecho y la obligación de ser felices
-dice el escritor y psicólogo Jorge Bucay-
mientras tengamos el privilegio de estar vivos".

El Coaching apoya procesos de cambio.
El Coaching posibilita el impulso para saltar
fuera de la "zona de confort".
El Coaching acaba con las toleraciones.
El Coaching permite alzar el vuelo hasta la mejor
versión de uno mismo.

El Coaching es el arte de mejorar la vida y los negocios.
Podemos tomar una decisión, aquí, ahora: la de ser felices.

Comentarios bienvenidos en :
azucenavega_coach@yahoo.es

miércoles, 25 de junio de 2008

Un equipo imbatible

Confesaré un secreto: Soy una mujer feliz. Entre otras consideraciones, porque mis clientes y yo formamos un equipo imbatible.

Realmente el Nosotros es más inteligente (smarter) que el Yo. Eso dice el libro que estoy leyendo centrado en la wikicomunidad. Eso es lo que compruebo a diario en mi trabajo como Coach. Lo repetiré: El Nosotros es más inteligente que el Yo.

Mis clientes y yo formamos un equipo imbatible. Trabajo con un ingeniero de una empresa de aviación radicada en Madrid, a quien hace unos meses le resultaba imposible desplegar las alas para imaginar un sueño profesional.

Mi ingeniero -que trabaja a diario con enormes alas tecnológicas y aeronaúticas-tenía las suyas atrofiadas. Esta mañana, sin embargo, -25 de junio de 2008- como resultado de algunas acciones planificadas desde su proceso de Coaching, le han propuesto ser el representante técnico de Aernova en México frente a Bombardier y Sikosky, durante al menos tres años.

Ni en el más loco, intrépido, extravagante de sus sueños, hubiera atisbado en el horizonte lo que es ya una sólida propuesta sobre la mesa de su despacho.

Somos un equipo imbatible y hoy es un gran día. Celebremos el triunfo del atrevimiento mesurado ¿estratégico? frente al miedo, la mediocridad y el conformismo.

Sigamos construyendo equipos imbatibles desde el Nosotros que, insisto, resulta más inteligente que el Yo.

lunes, 23 de junio de 2008

La Escucha de Calidad

Escuchar a las personas es importante siempre. En la vida,y en el Coaching. Se sienten especiales, únicas, importantes.

De repente, ante su Coach... la escucha activa, silente, de calidad,
la llamada escucha en nivel Dos B, permite conectar con el ser humano que late bajo la piel ¿con su alma?

Se escuchan las palabras, se escuchan los silencios, se escuchan los gestos
desde esa ciencia que se llama sinergología, se escuchan las emociones...

Sin juzgar, el Coaching permite una aproximación íntima a un ser humano,
a sus anhelos más profundos, a sus miedos, a sus sueños.

El Coach es un testigo facilitador de acciones, de cambios, de transiciones.

sábado, 21 de junio de 2008

El alma de las organizaciones

Existe una pieza llamada alma que lo es todo en un violín. Lo he descubierto esta mañana en el número 23 de la calle Achalmstrabe de Stuttgart (Alemania) donde trabaja el famoso luthier Antoine Muller.

Los artesanos de estos bellos instrumentos musicales manejan con primor el alma de los violines porque de ello depende en buena parte su sonido.

Es una pequeña pieza situada en el corazón mismo del instrumento, dentro, entre ambas tapas de madera. Se trata de una diminuta pieza delicada y fuerte a un tiempo.

Desde el exterior se manipula sin abrir la caja,con exquisito cuidado. Si no tienes el honor de ser testigo del manejo del alma por parte de un experimentado luthier, es complejo imaginar los micro-movimientos que realiza el artesano más conectado a la abstracción de la sensibilidad en estado puro que a la materia. Y sin embargo
-insisto- de la precisión del alma dependen en gran medida la sonoridad del violín, es decir, en términos productivos, su eficacia.

Los seres humanos también tenemos alma.
Los Coaches, como los luthiers, trabajamos a partir de esa etérea materia prima: el alma, lo más recóndito, lo más sagrado, lo más fuerte y lo más sensible de las personas y las organizaciones... El alma.

Algunos lo llaman Misión-Visión y Valores de las empresas y, ciertamente, algo hay de ello cuando los equipos trabajan sobre sí mismos -acompañados de un Coach- buscando en las entrañas de la organización la esencia misma, el motor, el sentido último del proyecto productivo.

Fred Kofman (Conscious Business), a quien soy adicta, lo resume en el concepto "Success beyond the Success" o "Éxito más allá del Éxito", del logro de objetivos medibles en cifras de varios dígitos alcanzables a corto plazo.

Me gusta sentir que parte de mi trabajo se aproxima al alma de las organizaciones, algo intangible, delicado y fuerte a un tiempo, que da sentido a todo lo demás y de lo que en buena parte depende la pervivencia, el eco ¿la sonoridad? de las empresas en un entorno cambiante, rápido, competitivo y transfronterizo.