martes, 30 de noviembre de 2010

Lo esencial

-Mi fortuna por un gorro de lana que cubra las orejas- dijo Charles Leickert y se movilizó media ciudad en busca de la rústica prenda. Parece algo desmesurado (impensable) y sin embargo se entiende caminando sobre el puente Erasmus (Rotterdam): un viento gélido y escarcha en las aceras y sobre los gigantescos cargueros que pasan vacíos bajo el puente de regreso a sus puertos de origen.

La ciudad pedalea a un trepidante ritmo laboral. Ajenos a la oscuridad (nunca acaba por ser de día), a la niebla y la nieve, corren de un lado a otro empujados por el frío y las ganas de llegar a su destino con las bicicletas atiborradas de maletines, ordenadores, flores y compras.

Charles se hubiera tomado un chocolate caliente en la zona peatonal, tercera planta de Selexyz, en el número 58 de Hoofdstuk donde hoy -excepcionalmente- no había conexión a internet. Lástima que el bueno de Charles muriera hace muchos años, tras pintar algunos de los gloriosos cuadros colgados en el Rijks Museum (www.rijksmuseum.nl). Sus paisajes reflejan los Países Bajos, una tierra en la que la arquitectura, el diseño, las artes gráficas, la música y la cultura mantienen a la población entretenida y calentita en sus casas, pubs, cafetines de tertulia y fiestas privadas. Nunca sin guantes y bufanda o no alcanzarán tu destino sin un colapso térmico. He comprado una reproducción de Leickert "Paisaje de invierno" pintado en 1876: podrán verla en el despacho, cuando regrese embutida en el gorro de Charles ;-D

Esta tarde toca concierto con la sirena de solista y sus treinta amigos multiraciales. En el intermedio hay un aperitivo, como es tradición en Alemania, Suiza y Holanda. Prometo compartir... será mañana.

No hay comentarios: