martes, 5 de julio de 2022

¿Cómo acertar en la elección de un CEO?

 

La selección de profesionales se torna crítica en los negocios, más si se trata de directores generales donde una errática y fallida selección tiene un impacto relevante en varias líneas de flotación.

Hace unos días recibí el encargo de acompañar la selección de Ceos para empresas participadas de un grupo de Capital Riesgo constituido por cuatro socios menores de cuarenta años. Aunque el negocio va bien, se han equivocado escandalosamente en la selección de los primeros directivos de algunas compañías y no quieren que se repita.

Les honra el rápido aprendizaje sobre el terreno y la búsqueda de apoyo para esquivar nuevos errores. 




A los socios del grupo de Capital Riesgo les interesa acertar con el profesional adecuado pero hay un paso previo al que no han dedicado tiempo/ mimo/ reflexión y es clarificar cómo es -exactamente- el perfil de directivos que quieren incorporar lo que implica capturar el ADN del grupo muy focalizado en el negocio pero con algunos valores y principios interesantes. 

Cuando detallaron las características que desean en sus directivos de primer nivel referenciaron la pasión emprendedora, productividad, conocimientos técnicos, trayectoria internacional y otras vaguedades. Traté de llevarlos más lejos, lo que permitió que descubrieran su miopía: difícilmente pueden encontrar lo que no saben que buscan, de igual manera que es complejo clarificar qué hay exactamente bajo la nebulosa de la fotografía (tomada en el planeta Marte). 

En contratación la cuestión esencial es saber exactamente lo que se busca lo que exige un análisis preciso del sector, empresa, tipo de propiedad, momento de su historia, resultados económicos, reputación, tamaño, estilo de gestión y liderazgo, cultura organizacional etc. Lo primero es que los cuatro socios del grupo habiliten una jornada en la que reflexionen juntos sobre estos aspectos y después ya aplicaremos entrevistas personales y contrastes metodológicos basados en ciencia como el Test Belbin, Test Jung y Briggs-Myers u otros. Para acertar con el zapatito de Cenicienta lo primero es conocer con precisión el tamaño de su pie.


No hay comentarios: