Jugar con el corazón (Editorial Plataforma Testimonio) es el título de su libro cuyo segundo mensaje en portada reza: cuando la excelencia no es suficiente. Se trata de un volumen ligero -129 páginas- disfrutable por cualquier persona aficionada o no al balonmano en el que Xesco simplifica la raza humana en tres categorías: las personas que no se enteran de nada; las que sí se enteran; y las que hacen que las cosas ocurran. Primer round: ¿A cuál de estos tres grupos pertenece usted? Cinco segundos de silencio. Párese aquí a responder, por favor. Y decida si su respuesta le satisface o es algo que desea cambiar.
Segunda aportación. Si alguien nos dice que lleva un diario, tendemos a interpretar que registra por escrito los hechos de su vida a posteriori. Sin embargo, existe una versión más original, atractiva y a decir de Xesco eficaz: llevar un diario de lo que queremos que ocurra en el futuro, es decir, dibujar, escribir e idear de antemano, los sueños, las metas, logros y objetivos emocionantes cuya mera contemplación nos ponen los pelos como a Espinete... Dice que él guarda estos diarios de futuribles y que gran parte del momento dulce que vive en 2010 estaba escrito hace ¡una década! Usted, con qué sueña, dónde plasma esos registros, qué imágenes pone en su casa, en su oficina, en la nevera... ¿con qué inalcanzables se atreve a flirtear? Cinco segundos de silencio. Párese, por favor, a responder. Después... sigamos juntos.
Dice el entrenador que lo más arriesgado es no arriesgar. O vives tus sueños (en mayor o menor escala) o estás viviendo el sueño de otro. Mercenarios. No, gracias. Por último, unas líneas en honor de mi amigo Roge -profesor de Deusto experto en liderazgo-. Para que un equipo funcione hay que tener presentes cuatro características. La generosidad (hoy por ti, mañana por mí), la humildad (o dejarse ayudar), el compromiso (seguir sudando al máximo cuando el asunto deja de ser divertido porque hay dificultades) y, por último, el entusiasmo que se contagia. Para terminar, dos recomendaciones de Xesco Espar: si quiere desarrollar su máximo potencial contrate un Coach, o ponga en marcha un peer group. Otro día vemos esto.
1 comentario:
Ni un punto, ni una coma,... al coach. En el centro de la sala con una libreta repleta de sueños, Azucena escucha y toma nota, de colega a colega.
La de ayer, fue un final de tarde que no me dejó indiferente. ¿Es o no el piropo que le gustaría oir?
Párese, por favor, a responder. Después... sigamos juntos.
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