lunes, 3 de septiembre de 2018

La Inteligencia Emocional ¡no es suficiente!



La inteligencia emocional es necesaria pero no suficiente para levantar un equipo de trabajo sobre la columna vertebral de la eficiencia. 

Soy consciente de que mi afirmación resultará desconcertante para muchos e irritará a algunos. Sin embargo, persisto en el enfoque: la inteligencia emocional es necesaria pero no suficiente para conseguir que un equipo funcione en el seno de una organización productiva.





¿En qué baso mi rotunda afirmación? En la teoría y práctica de las enseñanzas de algunos de mis mentores, en sus libros y publicaciones, y en la transmisión directa de conocimiento de algunos sabios que han dedicado su vida al estudio de los equipos de trabajo: Michael West, Kurt Lewin, Stephen Covey, John Whitmore, Alain Cardon, Robert Dilts, Meredith Belbin, Otto Scharmer, Arawana Hayashi, Peter Senge, Claudio Naranjo... 

De hecho, un poco de persistencia y contraste en la vida real de fábricas y despachos nos llevará a descubrir que todo grupo humano se asienta sobre tres grandes ejes temáticos: cognitivos, afectivos y conductuales que a su vez se despliegan en los llamados "factores situacionales" entre los que se encuentran el modelo mental compartido, la cultura organizacional o la reflexividad por citar solo tres que nada tienen que ver con la inteligencia emocional y son relevantes por su impacto en resultados.  

La inteligencia emocional es necesaria en la construcción de equipos -como eje afectivo- pero... ¡no es suficiente! 



Formación relacionada con el coaching de equipos:
Zaragoza, programa seis meses de duración. 2018.
Jornada monográfica sobre el coaching de equipos:
Zaragoza, 21 de septiembre de 2018.

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