Día Uno. Lunes 16. Mi reflexión de hoy: quizá nos toca practicar la humildad ante lo impredecible -pequeño como un virus, casi invisible- que está volteando-paralizando al planeta...
Día dos. Martes 17. Mi reflexión de hoy: calculando el delicado equilibrio entre la sensatez (tomar medidas protectoras para los demás y para mí) y evitar innecesarias obsesiones/paranoias.
Día tres. Miércoles 18. Mi reflexión de hoy: la pandemia golpea la salud física y la estadística registra el número de fallecidos y afectados... Me temo que el impacto psicológico está siendo mayor. Encerrados, aislados, temerosos... ¿quién está poniendo el termómetro al bienestar psicológico del planeta?
El desafío es mantener la cordura y rozar la gozosa alegría de estar vivos mientras contribuimos a mejorar las cosas milímetro a milímetro... ¡en nuestra pequeña-grandeza humana!
Día cuatro. Jueves 19. Mi reflexión de hoy: El tiempo se ha parado. La mirada se torna inteligente. Descubro una araña en el alféizar de la ventana, un email sepultado en la bandeja de entrada, un proyecto interesante en mi cuaderno y una lámina para reproducir con pintura al agua. Empiezo por la acuarela. Creo que la araña puede esperar.
Día cinco. Viernes 20. Mi reflexión de hoy. ¿Dónde estaba mi vida cuando trabajaba diez horas diarias fuera de casa? Día seis. Sábado 21. Mi reflexión de hoy. ¡Quiero ser perro!... Podría salir a la calle tres veces al día y oler las margaritas del jardín.
Día siete. Domingo 22. Mi reflexión de hoy. En casa hemos hecho una competición: el que ganaba podía salir a comprar el periódico y el pan. ¡He ganado! y me he sentido la persona más afortunada de la tierra. He caminado ciento veinte pasos al norte de mi casa hasta la panadería del barrio ¡fascinante! Lo más.
Día ocho. Lunes 23. Mi reflexión de hoy. Cuarenta y tres años con el mismo hombre. No había sentido con semejante intensidad cuánto le quiero hasta esta mañana cuando ha vuelto de la calle tras comprar frutas y verduras frescas. Media hora fuera de casa. Pánico a perderlo. Vulnerabilidad.
Día nueve. Martes 24. Mi reflexión de hoy. Me he propuesto salir mental, emocional y físicamente fortalecida del confinamiento. Alterno sesiones de ejercicios marciales -que he practicado durante dos décadas- con enérgica limpieza de cristales y azulejos. Aunque me deja agotada, resulta práctico. Si esto continúa la casa proyectará destellos al otro lado de la bahía...
Día diez. Miércoles 25. Mi reflexión de hoy. Mi abuela escuchaba la radio de galerna. Yo creía que era algo del pasado. En el confinamiento oigo a los locutores de RNE durante... ¿ocho-diez horas? al día al otro lado de la pared de la cocina. Mis vecinos siguen la evolución de las noticias como antaño mi abuela seguía los consejos de Elena Francis.
Día once. Jueves 26. Mi reflexión de hoy. Mi pasado es la máquina de escribir Underwood. Mi naturaleza es analógica. Los primeros ordenadores me parecían "bichos". Desde hace años he integrado la tecnología en mis rutinas pero desde el confinamiento estoy haciendo un máster digital. Utilizo: Zoom, Slack, Bluejeans, Skype Empresarial... ¡Voilá! me he vuelto trashumante de las plataformas que permiten trabajar en remoto.
Día doce. Viernes 27. Mi reflexión de hoy. Cuando se captura a un Samurai en tiempos de guerra la tortura se focaliza en "quebrar su voluntad", es decir, en debilitar sus creencias, valores y comportamientos propios de las personas de alta aspiración moral. En tiempos de guerra con el invisible enemigo (recluidos en nuestras casas) el riesgo consiste en que se quiebre nuestra voluntad -acaso nuestra disciplina- y en esa batalla andamos todos.
Día trece. Sábado 28. Mi reflexión de hoy. Me lavo tanto las manos que me están saliendo escamas. Me vendrá bien cuando comience la época de baños en el Cantábrico... si procede ?!
Día cuatro. Jueves 19. Mi reflexión de hoy: El tiempo se ha parado. La mirada se torna inteligente. Descubro una araña en el alféizar de la ventana, un email sepultado en la bandeja de entrada, un proyecto interesante en mi cuaderno y una lámina para reproducir con pintura al agua. Empiezo por la acuarela. Creo que la araña puede esperar.
Día cinco. Viernes 20. Mi reflexión de hoy. ¿Dónde estaba mi vida cuando trabajaba diez horas diarias fuera de casa? Día seis. Sábado 21. Mi reflexión de hoy. ¡Quiero ser perro!... Podría salir a la calle tres veces al día y oler las margaritas del jardín.
Día siete. Domingo 22. Mi reflexión de hoy. En casa hemos hecho una competición: el que ganaba podía salir a comprar el periódico y el pan. ¡He ganado! y me he sentido la persona más afortunada de la tierra. He caminado ciento veinte pasos al norte de mi casa hasta la panadería del barrio ¡fascinante! Lo más.
Día ocho. Lunes 23. Mi reflexión de hoy. Cuarenta y tres años con el mismo hombre. No había sentido con semejante intensidad cuánto le quiero hasta esta mañana cuando ha vuelto de la calle tras comprar frutas y verduras frescas. Media hora fuera de casa. Pánico a perderlo. Vulnerabilidad.
Día nueve. Martes 24. Mi reflexión de hoy. Me he propuesto salir mental, emocional y físicamente fortalecida del confinamiento. Alterno sesiones de ejercicios marciales -que he practicado durante dos décadas- con enérgica limpieza de cristales y azulejos. Aunque me deja agotada, resulta práctico. Si esto continúa la casa proyectará destellos al otro lado de la bahía...
Día diez. Miércoles 25. Mi reflexión de hoy. Mi abuela escuchaba la radio de galerna. Yo creía que era algo del pasado. En el confinamiento oigo a los locutores de RNE durante... ¿ocho-diez horas? al día al otro lado de la pared de la cocina. Mis vecinos siguen la evolución de las noticias como antaño mi abuela seguía los consejos de Elena Francis.
Día once. Jueves 26. Mi reflexión de hoy. Mi pasado es la máquina de escribir Underwood. Mi naturaleza es analógica. Los primeros ordenadores me parecían "bichos". Desde hace años he integrado la tecnología en mis rutinas pero desde el confinamiento estoy haciendo un máster digital. Utilizo: Zoom, Slack, Bluejeans, Skype Empresarial... ¡Voilá! me he vuelto trashumante de las plataformas que permiten trabajar en remoto.
Día doce. Viernes 27. Mi reflexión de hoy. Cuando se captura a un Samurai en tiempos de guerra la tortura se focaliza en "quebrar su voluntad", es decir, en debilitar sus creencias, valores y comportamientos propios de las personas de alta aspiración moral. En tiempos de guerra con el invisible enemigo (recluidos en nuestras casas) el riesgo consiste en que se quiebre nuestra voluntad -acaso nuestra disciplina- y en esa batalla andamos todos.
Día trece. Sábado 28. Mi reflexión de hoy. Me lavo tanto las manos que me están saliendo escamas. Me vendrá bien cuando comience la época de baños en el Cantábrico... si procede ?!
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