sábado, 15 de febrero de 2020

La vulnerabilidad y el espíritu del aprendiz



La semana pasada ofrecí una Master Class en el Basque Culinary Center BCC (San Sebastián, Guipúzcoa). Bajo el pretexto de aprender a realizar presentaciones eficaces y hablar en público disfrutamos de una jornada desafiante, plena de participación, preguntas y aportaciones que enriquecieron cada milímetro de la sala.




El Master de Perfeccionamiento en Cocina tiene un númerus clausus de 25 estudiantes que -en este caso- provienen de ocho países y cuatro continentes. Aunque la edad media de los alumnos es de treinta años, la mayoría posee una trayectoria profesional como cocineros, jefes de sala e incluso como propietarios de sus propios restaurantes.  Para mí la experiencia fue chispeante, aunque hubo algunos momentos delicados. Les cuento.

La segunda parte de la Master Class incluyó la puesta en practica de la teoría  explicada en la primera así que algunos de los asistentes tuvieron que hacer una presentación ateniéndose a los cánones : inicio-nudo-desenlace, evitar tocarse la cara, no hacer clic clic con el bolígrafo, utilizar sinónimos, metáforas, datos, mirar a la audiencia etc. Cuando le tocó el turno a una jovencita se echó a llorar -sin tan siquiera moverse de su silla ni pronunciar una sola palabra-. Todos los compañeros verbalizaron su apoyo y le animaron pero ella seguió llorando roja como un pimiento morrón. Tensión. ¿Qué hacer?

Escuchar su vulnerabilidad y contribuir a trascenderla: sus compañeros como equipo y yo como docente. Ellos le apoyaron, sostuvieron y alentaron. Yo le apoyé, sostuve, alenté y no cedí ante la posibilidad de que se fuera del aula con la sensación de derrota. Expliqué con dulzura (y firmeza) que estaríamos allí hasta que se tranquilizara y nos dijera quién era, qué hacía y qué esperaba del BCC. También mostré mi propia vulnerabilidad y esa resonancia desató la magia de sus palabras.

Más tarde sometimos a votación las presentaciones de acuerdo a cinco parámetros: información, precisión, generación de confianza, expresividad y amenidad... Los ganadores fueron Damián y Bacareo. Patricia entregó los premios. Muy agradecida al BCC por esta preciosa experiencia profesional. 


Damián, Patricia y Bacareo,
alumnos del Basque Culinary Center,
San Sebastián (Guipúzcoa).


Vídeo relacionado. Brené Brown es entrevistada por la CBS sobre su libro: Dare to Lead donde habla de la vulnerabilidad y del espíritu del aprendiz. Duración: 6 minutos.


No hay comentarios: